FRESNO, CA – Seis meses después del choque mortal en Fresno que cobró la vida de Ciriaco Santiago Gómez, un inmigrante y trabajador agrícola muy querido en Fresno County, su amigo Gerardo Pérez fue sentenciado a dos años de prisión.
Ambos viajaban juntos en el Honda Accord de Pérez cuando, según testigos, el conductor perdió el control a 97 mph y se estrelló contra un huerto. Minutos antes, había una discusión dentro del auto. La defensa incluso intentó culpar a la víctima, alegando que Gómez habría intentado tomar el volante.
Pero lo que más indignó a la familia fue lo que ocurrió después: Pérez huyó de la escena, dejando a su propio amigo herido de muerte, sin pedir ayuda ni llamar a emergencias. La fiscalía destacó que esa decisión impidió realizarle una prueba de alcohol.
Días más tarde, Pérez se entregó en la estación de policía de Orange Cove y se declaró culpable de abandonar el lugar del accidente. Su abogado pidió libertad condicional, pero el juez fue tajante: “Eligió no auxiliar a la víctima. Mostró cero consideración”.
Para la familia de Santiago Gómez, la condena es demasiado leve, pero lo recuerdan como un hombre trabajador, alegre y siempre sonriente. Su prima Rosa lo resumió con dolor: “Lo más triste es que lo dejó solo, siendo su amigo. Confiamos en que la justicia de Dios será mayor”.